Todos las personas que trabajan deberían poder tomarse el tiempo que necesitan para, recuperarse de una enfermedad grave, darle la bienvenida a un nuevo bebé o cuidar a un familiar enfermo al borde la muerte. Todos merecemos tiempo libre para cuidar de nosotros y nuestra familia.

Necesitábamos días pagados por enfermedad desde antes del COVID-19, pero es increíble que luego de una pandemia,  aún NO tengamos garantizados días por enfermedad pagados, para cada persona en la fuerza laboral.

Perder un trabajo es bastante estresante, pero tratar de encontrar un nuevo trabajo mientras  se sobrevive con $350 por semana o menos en beneficios de desempleo, es simplemente ofensivo. NC está clasificado como el peor estado en beneficios por desempleo.

Ganar lo suficiente para pagar nuestras cuentas y ahorrar para emergencias no debería ser solo un lujo para unos pocos. Otros estados del sur han aumentado su salario mínimo para apoyar a los trabajadores. Esto nos demuestra lo que siempre hemos sabido: un salario mínimo de $15 es un estándar realista, no una ilusión o fantasía.

Nuestros líderes electos en Carolina del Norte no hicieron lo suficiente para proteger a los trabajadores del COVID. Nuestro estado tiene la decimoquinta tasa más alta de muertes en el lugar de trabajo del país. Podemos y debemos hacerlo mejor. Nuestras vidas dependen de ello.